#Actualidad Marketeers Especialista de Toulouse Lautrec explica que la creatividad se ha convertido en uno de los factores principales para dar soluciones a la crisis generada por la pandemia y cómo hoy, más que nunca, se requieren perfiles creativos e innovadores que se animen a desafiar lo tradicional. La pandemia por el Covid-19 no solo ha afirmado el teletrabajo en el mundo laboral; también ha acelerado la búsqueda, de parte de las empresas, de ciertas habilidades que hoy pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte (del negocio). De acuerdo con el estudio The Future of Works and Skills in 2030, desarrollado por la Comisión para el Empleo y las Competencias del Reino Unido, en nueve años muy pocos profesionales van a requerir skills tradicionales. Asimismo, una nueva ola de nuevos negocios tendrá a la creatividad e innovación como las bases principales sobre las que se cimentará la rentabilidad de las compañías. “En un entorno cada vez más competitivo, es importante potenciar nuestras habilidades personales y profesionales, adaptarnos a las nuevas exigencias del mercado y mejorar nuestra empleabilidad. Hoy se necesita contar con profesionales altamente creativos, capaces de responder mejor a las nuevas necesidades y de generar soluciones innovadoras que ayuden a transformar nuestra sociedad”, explica Karen Stiegler, directora de Innovación y Desarrollo de Toulouse Lautrec. Sin embargo, ¿qué debemos hacer para que los futuros profesionales tengan estas habilidades en el mindset y contribuyan al desarrollo del país? En la institución educativa Toulouse Lautrec, por ejemplo, aplican Toulouse Thinking, que es una novedosa metodología de enseñanza que prioriza la investigación, ideación, desarrollo de prototipos y transferencia de ideas. Este proceso da como resultado soluciones innovadoras que aportan valor para combatir las problemáticas reales de la sociedad. “En esta nueva normalidad, hemos potenciando el aprendizaje en línea de los estudiantes gracias a diversas herramientas digitales, las cuales aseguran y favorecen la colaboración entre profesores y estudiantes. Nuestra dinámica metodología Toulouse Thinking promueve el desarrollo de propuestas creativas e innovadoras en este contexto”, explica Stiegler. Si la creatividad se está convirtiendo en la fuerza motora de la economía mundial, diferentes países están apostando por una economía creativa (que hoy por hoy aporta el 3 % del PBI mundial con 30 millones de puestos de trabajo), y, como dicen los ingleses, hacia el 2030 lo tradicional será obsoleto; nos toca demorarnos cada vez menos en adquirir estas habilidades. Nueve años no son nada.