cada vez más 4.0, una ciudadanía cada vez más consciente de la preservación del ambiente; desarrollo sostenible dotado de jerarquía constitucional desde 1994; gran biodiversidad que no solo contribuye a mitigar el cambio climático y fortalecer la resiliencia sino que también es proveedora de fuentes de trabajo. Por otra parte, transitamos un contexto internacional sumamente propicio en diversos aspectos: el compromiso y las políticas activas respecto a la neutralidad en carbono para 2050, el liderazgo que han tomado los Estados Unidos con su bienvenido impulso al combate contra el cambio climático, el crecimiento de las finanzas sostenibles de las que Argentina no debería quedar rezagada y una cada vez más contundente conciencia ambiental.En la medida que se remuevan los obstáculos mencionados, se aprovechen las fortalezas con las que cuenta Argentina, el sector público convoque a los distintos sectores productivos, al sector científico, a las instituciones educativas, a las organizaciones no gubernamentales y se adopten políticas públicas en un marco de sostenibilidad donde conviven los tres pilares: el económico, el ambiental y el social, podremos iniciar un camino de prosperidad donde nadie quede atrás. Por María Paula Lopardo. Abogada especializada en Derecho Ambiental (UBA). Postgrados en Universidad de Colorado, USA y en la Universidad Politécnica de Valencia, España. Diputada de la Nación (Mandato Cumplido) por Cambiemos. https://www.linkedin.com/in/mariapaulalopardo/