La auditoría más reciente de la Asociación Europea de Etanol Re-novable (ePURE) ha puesto en evidencia que, en 2023, las biorrefi-nerías de etanol no solo se dedicaron a producir biocombustibles, sino que generaron una mayor cantidad de alimentos. Esto resalta la relevancia de estas instalaciones no solo en la lucha contra las emisiones de carbono, sino también en la seguridad alimentaria. Según los datos auditados, las biorrefinerías produjeron 6,5 millones de toneladas de coproductos alimentarios, destacando la alta producción de alimentos ricos en proteínas. Mientras tanto, la cantidad de etanol renovable alcanzó los 5,08 millones de toneladas. Estas cifras reflejan cómo las biorrefinerías desempeñan un rol clave tanto en la descarbonización del transporte como en el abastecimiento alimentario de la región.