Cabe resaltar la gran oportunidad que se presenta para varios países de la región que cuentan con matrices energéticas renovables y que además impulsan un paulatino compromiso en acelerar la descarbonización del transporte, el cual surge del Acuerdo de Paris sobre cambio climático. Si tenemos en cuenta que a nivel regional, el transporte representa una cuarta parte de las emisiones (IPCC) es evidente pensar que tanto la industria automotriz como energética cumplen un rol muy relevante en el proceso de transición. En ese sentido sustituir los vehículos de combustión por eléctricos y además orientar los esfuerzos hacia modelos de movilidad sostenible (Mobility as a service) son actualmente los desafíos que la región está afrontando para lograr reducir las emisiones de CO2 y de esa manera ayudar a mejorar la calidad de vida de las personas. CIUDADES SUSTENTABLES